CON NOCTURNIDAD Y ALEVOSÍA

«Zchzzs, risss» Con sus posaderas perfectamente encajadas en la apertura del trono empezó a escuchar un ruido extraño. Hacía tres meses que comenzaron las obras de la mejora del alcantarillado. Su casa al estar en bajo sufría inundaciones y ya por fin se habían decidido a solucionarle el problema. Pero cuando parecen que las cosas van mejor, algo se ha pasado por alto. El viejo barrio donde vivía había hecho uso hasta entonces de las abandonadas acequias de regadío y de los pocos pozos ciegos que quedaban enterrados en la localidad. En el siglo XXI aquellas canalizaciones podrían ser una reliquia para un arqueólogo que viniera a verlas embutido en pensamientos de viejos métodos constructivos; o bien un investigador, no menos cegado si cabe, con la etnografía, la historia de la arquitectura popular y el folclore. Es más, podría ser un campo prácticamente virgen en el panorama científico que requiriese la colaboración interdisciplinar. Así somos en este ...